LOS PERROS DE MI TIA

@Dzlmonstruo

Todo comenzó cuando yo tenía 8 años era un niño bien portado alto y con buenas calificaciones y en las vacaciones mis padres saldrían de viaje a otro lugar y no podían llevarme por lo que convencieron a mi tía que vive sola para que me quedara con ella y acepte, cuando llegamos mi tía tuvo que encerrar a los perros debido a que son algo bravos y me recibió con un buen abrazo, mis padres se despidieron y llevamos mis cosas hasta el piso de arriba en la habitación donde iba a dormir como era de noche merendamos me bañe y me dormí.

A la mañana siguiente mi tía se levantó temprano se bañó hizo el desayuno y me baje a la cocina se adelantó y dijo que tenía que salir porque iba a una junta y de paso iba a hacer las compras por lo que me quede solo y me dijo que no le abriera a nadie y sobre todo no me saliera al patio porque los perros me podían morder así que se fue termine de desayunar, recogí la mesa, lave mi plato y mi vaso y para no aburrirme me puse a jugar con unos carritos a escala que traje para entretenerme y mientras estaba jugando uno de mis carritos se fue debajo de un librero y me agache para buscarlo y parecía ser que mi tía no cerro bien la puerta que da al patio y los perros entraron y no me di cuenta porque estaba de rodillas con una mano extendida para alcanzar mi coche y con la otra me apoyaba en el piso, sentí algo de aire por mis pompas pues era el hocico de uno de los perros que antes de reaccionar se me monto encima y con sus patas delanteras me bajo mi pantalón corto para dejar al descubierto mi trasero desnudo sentí que algo quería entrar y fue así como Canelo (un perro labrador de aproximadamente tres años de pelaje color canela –de ahí el nombre-) me convirtió en su perra yo lloraba porque me dolía lo que me estaba haciendo trate de zafarme pero mientras más lo intentaba el perro más fuerte me sujetaba, me enterraba ese pene que sentí más grueso y en uno de esos me entro fuerte yo di un grito de dolor y cuando me embistió su verga ya la tenía clavada en mí, duramos así como unos diez minutos hasta que se volteó y quedamos pegados cola con cola un líquido recorrió mis pompas y bajaba por mis piernas hasta el piso era el semen que me había bombeado, Canelo trató de zafarse pero al estar pegados no podíamos sepáranos, su pene en el interior de mi ano se hizo muy grueso salió pero me dolió cuando me lo estaba sacando y por fin quede libre, al menos eso fue lo que pensé pero mi pesadilla no terminaba aún pues después de Canelo siguió Káiser (un perro pastor alemán y el más grande de los tres) y me atrapo cuando trataba de arrástrame pues las piernas me dolían como para ponerme de pie puso sus patas delanteras sobre mí espalda para que no me escapara medio me pare para quedar otra vez en cuatro y con toda su fuerza me clavo su punta que era más gruesa que la de Canelo y por supuesto me dolió más pero cuando me perreaba comencé a sentir un placer que no había sentido en mi vida los perros de mi tía me estaban cogiendo como una perra y comenzó a gustarme ese dolor que sentí al principio se volvió una sensación que quería seguir disfrutando y comencé a ladrar como si fuera una perrita los otros dos perros me lamian la cara secando mis lágrimas me dieron una experiencia que nunca olvidare Káiser me inyectaba de su leche caliente que sentí como entraba en mis pompas y calentaba mis entrañas y cuando me dio un empujón fuerte grite pues me clavo sus bolas y quedamos igual cola con cola mientras Káiser trataba de zafarme yo lloraba debido a que su pene era más grueso y estaba más enterrado en mí por fin lo saco después de varios intentos yo ya estaba agotado y aún faltaba Volpi (el más pequeño pero no tanto como Canelo su pelaje era gris y no recuerdo de que raza era) me lamio mi pene e hizo que me orinara mojando mi pantalón así que me lo quite y me volví a poner en cuatro patas y también Volpi hizo lo suyo su miembro era del tamaño perfecto para mí ya que me entro sin problema y conforme me embestía más placer sentía me bombeo toda su leche ladraba como perrita y para cuando quedamos pegados meneaba mi culo queriendo sentir su verga clavada en mí se zafo sin problema y caí rendido no tardó en volver mi tía que me encontró tirado en el piso sin pantalones y mis pompas y mis piernas estaban manchadas de semen de perro rápidamente encerró a los perros y les dio de comer para después regresar a donde estaba yo me cargó hasta la sala y cuando recobre el conocimiento me preguntó qué fue lo que había pasado le dije que estaba jugando con mis cochecitos cuando los tres se me montaron encima y me clavaron su pene me dijo mi tía que no se lo dijera a nadie o se llevarían los caninos a la perrera para sacrificarlos me confeso un secreto; ella vive soltera debido a que su novio le resulto infiel y para consolarse adopto unos cachorros de una señora en el mercado y en una ocasión perreo con ellos para satisfacer su deseo sexual y me pidió que todo lo que hagamos a partir de ahora quedara en secreto y le dije que nunca se lo contare a nadie pero que dejara que sus perros me cogieran pues me había gustado mucho y quería que me lo hicieran otra vez en eso sonó el timbre mi tía fue a ver y era la hija de la vecina una preciosa niña llamada Nohemí que le vino a dejar unas cosas que le pidió su mamá y después le pregunto si podía jugar con sus mascotas y le dijo que si y me dijo ven Julio vamos a jugar los tres me presento ante su vecina y me dijo que yo también podía jugar con los perros en eso los llamó entraron los tres perros y tanto mi tía como Nohemí se levantaron las faldas se bajaron su ropa interior y se pusieron en cuatro me dijo que yo también lo hiciera me baje mi pantalón y mis calzones y me puse en cuatro y en ese momento Káiser se montó sobre mi tía Canelo a Nohemí y Volpi a mí en eso Nohemí pregunto mi nombre le dije que me llamo Julio y ella me dijo mucho gusto soy Nohemí tengo 9 años y me gusta jugar con los perros de mi vecina  los tres perros nos cogían como a sus perras Nohemí estaba atenta como Volpi me dominaba y me hacia su perra ladre como perrita y eso a Nohemí le dio risa y me dijo: pareces una perra de verdad y le dije: tú también los tres estábamos en éxtasis gemíamos de placer y nos llegó la recompensa final una inyección de semilla de perro después de eso los perros se salieron nos limpiamos nos vestimos y Nohemí se fue para su casa y nos quedamos solos mi tía y yo me dijo que desde hace unas semanas Nohemí le gusta perrear con sus canes y por eso viene del diario ya que tanto mi tía como su vecina son buenas amigas después de comer hicimos el aseo y ya en la tarde vino otra vez Nohemí y me dijo mi tía que nos fuéramos a su recamara cerramos la puerta y nos dijo que nos quitáramos la ropa lo hicimos y vi desnuda a Nohemí era una belleza y me pregunto si era bonita y le dije que sí y mucho mi tía también se desnudó y vi esas tetas descomunales y nos dijo que se las chupáramos yo le chupaba una teta y Nohemí la otra nos dijo chupen más fuerte lo hicimos aunque no salió nada de leche en eso me empieza a chupar mi pito hasta que quedo completamente erecto era la primera vez que me sucedía y en eso mi tía me dijo méteselo a Nohemí se lo metí y le gustó mucho estuvimos cogiendo como amantes hasta que nos cansamos luego dijo mi tía ahora yo se lo metí mientras Nohemí le seguía mamando las chichis y después ella me dijo chúpame las mías y aunque eran pequeñas eso no le quito sus suavidad y sabor después de un rato llamo a los perros y nuevamente nos cogieron como perras en celo lo hicimos durante todo el tiempo que estuve con ellas y algunas veces me quedaba más tiempo para seguir perreando con sus mascotas y tanto Nohemí y yo nos hicimos novios y tanto tenemos relaciones como dejamos que nos monten los perros de mi tía.